Iván Aguirre, un subcomisario de 42 años, fue imputado hoy tras encontrarse en su domicilio de dos autos robados en Buenos Aires cuya propiedad no pudo certificar, uno de los cuales tenía la patente de un patrullero fuera de servicio. Hasta el momento Aguirre se desempeñaba como subjefe de la comisaría 12ª de Rosario.
El fiscal Gonzalo Fernández Bussy lo acusó por presuntas irregularidades durante su gestión a cargo del depósito judicial durante el año 200, período en el que Aguirre no informó a sus superiores por el incendio de cinco autos dentro del depósito que estaba bajo su responsabilidad. Tampoco comunicó el robo de seis vehículos del interior de ese predio.
Otra de las imputaciones refiere al hallazgo en su casa particular de una Volkswagen Amarok que había sido remitida al depósito judicial en abril de 2020, cuyos guarismos figuraban con pedido de secuestro en Buenos Aires. La misma tenía colocada la patente de un móvil policial de Funes que estaba en el depósito judicial “fuera de servicio”. También, poseía un Volkswagen Vento robado en La Matanza en abril de 2019 y que también tenía otra patente.
En síntesis, Iván Aguirre fue imputado por los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público, en concurso ideal con omisión de denuncia, sustracción e inutilización dolosa de elementos probatorios, hurto agravado por ser funcionario público encubrimiento agravado en calidad de funcionario público, todo en concurso real y consumado. La jueza Paula Álvarez dictó la prisión preventiva efectiva por el término de ley.