El gobierno de la provincia de Santa Fe habilitó la utilización de la capacidad máxima permitida a cada establecimiento para el desarrollo de las diferentes actividades culturales, religiosas, deportivas, económicas y de servicios.
Así se modifica la disposición que, en el marco de las medidas dispuestas por la pandemia, limitaba la ocupación a un 70% de la capacidad. “La medida obedece a la mejora de los indicadores sanitarios y epidemiológicos, y a la evolución de la campaña de vacunación”, señaló Juan Pusineri, ministro de Trabajo provincial.
La resolución recuerda que el uso de la capacidad máxima de cada espacio podrá realizarse respetando todos los protocolos sanitarios instrumentados para el desarrollo de cada una de las actividades: distanciamiento entre asistentes, la utilización de barbijo en espacios cerrados, y al aire libre cuando se diera la concurrencia de personas ajenas al grupo conviviente. También insisten en la ventilación de los ambientes, la provisión de elementos para la higienización de manos, y la prohibición de participación en las actividades de las personas que revistan la condición de “caso confirmado”, “caso sospechoso” o “contacto estrecho” de covid-19.