Ariel Zancocchia, el ex subjefe de la policía provincial, quien fuera apartado de su cargo el pasado 30 de julio acusado de corrupción, fue imputado ayer como jefe de una asociación ilícita que se benefició con negociados con arreglos de patrulleros y el desguace de los que estaban en reparación.
La investigación por defraudación al Estado empezó en 2020, en plena gestión de Marcelo Sain. Quien fuera reemplazado por Emilce Chimenti, tenía una SRL dedicada a la mecánica automotor, chapería y pintura y que –a pesar de que vendió sus acciones– siguió siendo prestadora para el arreglo de móviles.
La imputación estuvo a cargo de los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada Luis Schiappa Pietra y Matías Edery, y además de Zancocchia, la acusación alcanzó a otros ocho ex altos mandos de la Unidad Regional II.
Según la acusación de los fiscales, los acusados “se beneficiaron con la administración y disposición de vehículos, repuestos y/o autopartes de vehículos pertenecientes a las fuerzas policiales de la provincia mediante maniobras consistentes en entregar repuestos a terceros a cambio de dinero. Además, hicieron uso de esos repuestos y/o los comercializaron indebidamente con terceros; y lucraron indebidamente con el redireccionamiento de vehículos que debían ser reparados en talleres oficiales a empresas de terceros”.