Tras la polémica por los tres choferes de colectivo de larga distancia que habían dado positivo de cocaína en un control de narcolemia previo a llevar a 100 alumnos de 7mo grado, finalmente se confirmó que las contrapruebas dieron negativo.
Desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) reconocieron que es habitual que los choferes mastiquen hojas de coca, sobre todo para los viajes que van al norte por los efectos de la altura y la falta de oxígeno.
Explicaron que en algunos casos lo hacen para mantenerse despiertos, y también por cuestiones digestivas, “pero no tenemos antecedentes de que haya afectado algún sentido necesario para la conducción”, explicó Sergio Copello, secretario del gremio.
En tal sentido, adelantó que a los choferes se les devolvió la licencia cuando se comprobó que los análisis de sangre y de orina dieron negativo en consumo de cocaína: “Quiero esclarecer que la realidad no fue la que salió días atrás en muchos titulares. Está confirmado que los choferes masticaron coca, no consumieron cocaína”.