La realización de la Misa Criolla de Timbúes, una celebración muy tradicional en la localidad, que este año contaría con la presentación estelar de Abel Pintos, está en dudas a causa de una polémica de índole político electoral.
La fecha pautada por la actual gestión comunal, presidida por Amaro González, fue el 10 de diciembre, pero al ser derrotado en las pasadas elecciones donde buscaba su reelección, coincide con el día en el que deben asumir las nuevas
autoridades electas.
Entonces, el presidente comunal entrante, Antonio Fiorenza, se expresó desde un comienzo por la postergación del show, considerando que, a pocas horas de asumir, tendría bajo su responsabilidad una celebración con miles de asistentes, y un show de nivel internacional que él no organizó.
Mientras el evento aún no está confirmado, Timbúes además padece un paro de trabajadores comunales por deudas salariales, sumado al reclamo de proveedores que denuncian que hace meses no perciben lo que les corresponde.
El cuadro de situación se completa con la suma de los gastos del anunciado show musical, cuyo costo total asciende a los 10 millones de pesos, de los cuales la mitad ya fue abonada por adelantado, en tanto que en transcurso de esta semana se debiera abonar el resto.
Se espera que en las próximas horas se concrete una reunión entre el mandatario saliente y el presidente comunal electo para dar certezas sobre lo que sucederá, o no, el próximo 10 de diciembre, en una celebración tan cara a los afectos de los timbuenses.