Una serie de eventos bochornosos sucedieron este domingo por la tarde en un partido de la Liga Casildense de fútbol, encuentro que debió suspenderse tras una serie de incidentes que desembocó en el incendio de un patrullero.
El encuentro deportivo enfrentaba al Club Atlético Chabás recibiendo en su estadio a su coterráneo Huracán, por el pase a la final del torneo.
El local ganaba 2-0 pero el equipo visitante dio vuelta el marcador y logró ponerse al frente 3-2, y minutos antes del final se produjeron agresiones desde la tribuna hacia el campo de juego, lo que obligó a los árbitros a suspender el encuentro, tras lo cual la policía comenzó a reprimir con balas de goma y gases.
En ese contexto de tensión y violencia, muchos hinchas locales salieron del estadio y continuaron con los disturbios en la calle, donde se incendió móvil policial en circunstancias que aún se investigan.
Como balance, y además del patrullero destruido, varias personas terminaron heridas por golpes y balas de goma, mientras que una mujer policía debió ser asistida por un shock nervioso.