El municipio de Rafaela procedió, este lunes a la medianoche, a la clausura de un local donde se desarrollaban festejos por el Día del Amigo ya que no se estaban cumpliendo con los protocolos sanitarios vigentes para frenar el avance del COVID-19. “Las características del festejo eran las de una fiesta clandestina, ya que había música y personas bailando”, explicó el juez de Faltas de la Tercera Nominación, Rubén Pavetti.
Los motivos de la clausura fueron la no habilitación de las puertas de emergencia y el cierre con llave de las puertas de ingreso. Además, hubo un exceso en la cantidad de personas, ya que los negocios pueden operan con hasta el 50 por ciento de su capacidad, pero en este caso “la ocupación era de más del 100 por ciento”.
El juez destacó también la negativa de los propietarios para permitir el control ya que, en un primer momento, “se les impidió la entrada a los inspectores de Protección Vial y Comunitaria que debieron esperar 30 minutos afuera hasta que los dejaron ingresar”, explicó Pavetti.
Además, los inspectores de Protección Vial y Comunitaria infraccionaron otros locales que no respetaban la capacidad permitida y el distanciamiento obligatorio. Si bien estos locales no serán clausurados, deberán abonar una multa como consecuencia de no cumplir el protocolo.