Un derrumbe sobre el canal principal de navegación del río Paraná, a la altura de Arroyo Seco, provocó la interrupción de la navegación, generando grandes demoras de buques, que se amontonaron en las radas. La situación se ve agravada por la bajante histórica registrada en el cauce desde hace semanas, que provoca que los buques deben recortar sus cargas para poder atravesar la vía fluvial. Desde el sector estiman perdidas millonarias.
La empresa concesionaria de la hidrovía, Jan De Nul, informó que este sábado se produjo la caída de una porción del veril (pared del canal) del río Paraná a la altura del kilómetro 390 en la zona de Arroyo Seco, al sur de Rosario. “Este acontecimiento generado por causas naturales, y que puede ocurrir con algún grado de frecuencia, provocó en esta ocasión mayores preocupaciones y complicaciones, por el contexto de bajante histórica en el que ya se encuentra el río Paraná desde hace varias semanas”, indicó la compañía, que manifestó ya estar trabajando sobre las dragas para normalizar la altura permitida de navegación y que los barcos puedan retomar su rumbo.
La concentración de buques se da fundamentalmente al sur de Rosario, entre General Lagos y Villa Constitución. Gustavo Idígoras, titular de las cámaras de exportadores y procesadores de granos de Argentina (CIARA-CEC) se expresó sobre la situación: “Lo que está sucediendo hoy es que aquellos barcos que estaban cargando ya en las 32 terminales de esa zona están cargando menos todavía de lo que ya venían cargando”. Además, observó que la reducción en la carga por el derrumbe en el canal agrava las pérdidas de 240 millones de dólares para el sector agroexportador estimados por la Bolsa de Comercio de Rosario, producto de la severa caída en el nivel del Paraná.
Imagen gentileza La Capital