El religioso consagrado Juan Aveiro, acusado de abuso sexual contra tres internos discapacitados del Cottolengo Don Orione, será imputado este viernes por un nuevo delito: tenencia y facilitamiento de material pornográfico. A partir de la nueva imputación, la Fiscalía adelantó que insistirá con el pedido de prisión preventiva efectiva, luego de que la semana pasada el juez de Cámara Javier Beltramone le otorgara el beneficio del arresto domiciliario.
La nueva acusación se suma a los delitos de abuso sexual simple y abuso sexual gravemente ultrajante, en ambos casos agravado por haber sido cometido por una persona encargada de la guarda de la víctima, y abuso sexual con acceso carnal. Los hechos tuvieron como víctimas a tres internos mayores de edad con distintos grados de retraso madurativo, alojados en la institución donde el acusado se desempeñaba como catequista.
Antes de la audiencia, la fiscal Nora Marull informó que la nueva imputación “surge a partir de pericias del teléfono de Aveiro, en donde se encontró una cantidad de videos pornográficos en los cuales se pueden observar personas menores de edad, lo cual se configura en el artículo 128 del Código Penal, por el cual ya es delito la tenencia”. Pero además, le imputarán la divulgación de los videos, ya que así lo declaró una de las víctimas en Cámara Gessel.
El caso
En junio pasado, la fiscal Nora Marull, de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, imputó a Aveiro por tres hechos que tuvieron como víctimas a tres internos mayores de edad con distintos grados de retraso madurativo. Lo hizo durante una audiencia en la que la jueza Mónica Lamperti hizo lugar a lo solicitado por Fiscalía y dictó la prisión preventiva.
El hermano Juan no celebra misa, pero es un religioso consagrado, con votos de pobreza, castidad y obediencia, que daba catequesis en el Cottolengo. Realizada la primera denuncia, la institución aplicó un protocolo interno de intervención y trasladó al religioso a una entidad de Buenos Aires. Luego se agregaron dos denuncias más, que se sumaron a la acusación.
Foto gentileza diario La Capital