Este jueves el Concejo Municipal de Totoras realizó polémicos cambios a la ordenanza que regula la aplicación de fitosanitarios. La norma fue repudiada por el grupo Vecinos Autoconvocados por la Vida ya que establece la prohibición de 100 metros para fumigaciones en zonas urbanas, clubes y escuelas rurales, y un límite de 500 metros en torno a las denominadas Áreas Protegidas que, según indicaron, la norma no establece cuáles son.
“El tema de discusión son los metros. Hay dos concejales que están de convencidos de que 100 metros son suficientes. En juego está la salud, no es una lucha contra el campo”, sostuvo durante la sesión el concejal Javier Griva, quien junto con su par Fabián Montivero presentaron otro proyecto donde los metros de aplicación sugerían que sean de 500 sin excepciones, aunque no fue aprobado.
Por su parte, el edil Juan Ramón Giles defendió la norma aprobada y expresó: “Esto no se trata de metros sino de controles. Las aplicaciones solo pueden dar en horario nocturno en el área urbana, y por eso será más fácil de controlar. Ningún productor podrá realizar aplicaciones de día, además sólo serán productos de onda verde hasta los 500 metros”.