Un mes antes de las fiestas de Navidad y Fin de Año, el Ejecutivo municipal reglamentó la ordenanza que declara a la ciudad de Santa Fe territorio libre de pirotecnia. La medida llegó luego de que se acordaran los términos de dicha reglamentación con el concejal Ignacio Martínez Kerz, impulsor de la iniciativa. Según se supo, la normativa tendrá una aplicación progresiva durante dos años y se llevará adelante un proceso paulatino de disminución del uso.
“La ordenanza está vigente y plantea un proceso de adecuación y reducción paulatina, hasta llegar al momento de la eliminación total del uso de la pirotecnia de alto impacto sonoro”, subrayó el secretario de Control municipal, Ramiro Dall’Aglio, quien afirmó que, progresivamente y desde el mes de junio de 2018, “va a haber una reducción en los productos que tienen mayor contaminación auditiva y mayor potencia sonora”.
Asimismo, indicó que, como sucedió con otras ordenanzas que apuntaron a cambiar pautas culturales, el proceso de eliminación de la pirotecnia de alto impacto sonoro será paulatino. En ese sentido, aclaró que este año “en función de que las empresas y negocios habilitados, que son los únicos que pueden vender pirotecnia con la autorización y la etiqueta de fabricaciones militares, ya tienen el stock para estas fiestas van a poder vender como en años anteriores”.