El Ministerio de Agroindustria de la Nación informó que fue clausurado un molino clandestino en la ciudad de Rufino, el mismo que ya había sido intimado a regularizar su situación en octubre del año pasado. Durante un nuevo procedimiento, la Subsecretaría de Control Comercial Agropecuario (SUCCA) constató que continuaba desarrollando la actividad y que carecía de documentación de amparo sobre la mercadería en depósito.
La actividad se desarrollaba bajo la figura ficticia de Cooperativa de Trabajo, cuando en realidad se trataba de una sociedad que no contaba siquiera con número de CUIT. De esa manera, se procedió a la interdicción del total de la mercadería, compuesta por harina tipo 000 y 0000, además de 68 mil kilos de trigo en silos y trigo pre acondicionado para la molienda que la firma deberá transformar en harina y mantener en stock, por un total de 30 mil kilos.
En el procedimiento se constató que las harinas se comercializaban con el número de inscripción en el Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA) y del Registro Nacional de Establecimientos (RNE) de un tercero. El hecho fue categorizado por los técnicos de la SUCCA como ejercicio de “deslealtad comercial”, aunque evaluaron también que esta actividad “implica un riesgo para la salud de los eventuales consumidores, por lo que se delegó a la AFIP el expediente”.
