El secretario general de la seccional Rosario, Carlos Vergara, manifestó la preocupación que existe en la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) ante el convenio que el gobierno nacional aspira a sellar con su par chino para importar viviendas prefabricadas destinadas a sectores sociales. “Queremos casas hechas por nuestros trabajadores y no prefabricadas de China”, sentenció el referente.
“Traer casas prefabricadas anula las chances de que el trabajador intervenga en la construcción de viviendas, de que pueda ganarse su jornal realizando esa tarea. Por eso la UOCRA está y estará siempre en contra de esta idea de traer viviendas desde afuera, porque no generan puestos de trabajo”, amplió.
Y remató: “Traer prefabricadas sería un duro golpe a las expectativas que hay con el acuerdo por viviendas sociales. La importación terminaría beneficiando a un grupo económico de empresas que tienen un capital para traer esas viviendas. Nosotros estamos en desacuerdo y vamos a sostener la negativa. No lo vamos a aceptar de ninguna manera porque atenta contra la mano de obra de los trabajadores constructores argentinos”.
