A fines de septiembre de 2015, la región quedó conmovida por el ataque a hachazos de un hombre a su ex esposa. Sucedió en Chabás. La víctima, Alejandra Ortega, quedó gravemente afectada. Hace exactamente seis meses, se conoció que el agresor recibió una condena de 10 años de prisión en un juicio abreviado con consentimiento y notificación a la familia. Pero Alejandra parece haber quedado en el olvido luego del cruel suceso.
Es por eso que su hermano Ángel se contactó vía Facebook con el gobernador Miguel Lifschitz para hacerle un pedido. El hombre, radicado en Casilda, publicó una conversación que tuvo con el perfil del mandatario en la red social, en el que requería su contacto para seguir de cerca la situación actual de la damnificada.
“No quiero dinero en nombre de mi hermana. Es muy simple lo que le pido al Estado. En el año 2005 se me dio un terreno y una parte la ocupa mi madre. Lo que pido es que el gobierno le ceda una vivienda a mi madre, ya mayor de 69 años, para así yo poder tener a Alejandra y que el Estado le brinde la rehabilitación que corresponde. ¡Porque no se pueden olvidar de una más!”, redactó Ángel Ortega, y agradeció que la máxima autoridad provincial se ponga a su disposición.
Conocido el hecho, en diálogo con un medio local, el hermano de la víctima reveló ayer que “Alejandra está en la casa de mi hermana Érica. Yo tengo un lugar para mi mamá, y lo que estoy pidiendo es que ubiquen a mi mamá para poner a Alejandra en ese lugar. Ya pasó más de un año. Ella sigue en silla de ruedas y venimos reclamando la asistencia. Nunca hay turnos en el hospital, más allá que van a salir a desmentir todo”.
Por otro lado, recordó que “hemos pedido un subsidio para ‘bancar’ los gastos porque ella debería hacer rehabilitación continuamente. Pero de Chabás nos mandan a Casilda y de Casilda nos mandan a Chabás. Por eso recurrí al gobernador”. Y concluyó: “Le mande mi teléfono ayer, pero todavía no me ha llamado”.
