Tras el cierre de la planta de la cooperativa SanCor en la localidad de Coronel Charlone, en el partido de General Villegas, Buenos Aires, el delegado de la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (ATILRA) en el lugar, Jorge Morales, confirmó que los trabajadores llegaron a un acuerdo con la empresa para descomprimir la crítica situación que atraviesa, aceptando un régimen de jornada libre. Esto significa que durante dos o tres meses (todavía no está definido) los empleados cobrarán solamente un 75 por ciento del salario bruto y no se presentarán a trabajar.
En tanto que los pocos trabajadores que siguen activos para realizar tareas de mantenimiento, cobrarán un 15 por ciento de sus honorarios de manera diferida, durante seis meses. Luego, ese monto se devolverá a partir de los 12 meses, con haberes actualizados.
Por otro lado, Morales reconoció que el gobierno nacional está dispuesto a darle una mano a SanCor, siempre y cuando la empresa se comprometa a no despedir o suspender (sin goce de sueldo) a ningún empleado durante seis meses. “El ministro (de Agricultura, Ricardo) Buryaile nos dijo que había empresas interesadas en adquirir la planta de Charlone, pero que el gobierno nacional quiere que se salve a SanCor a nivel nacional. Hoy por hoy, la única solución es que alguna empresa compre SanCor o se haga cargo de una parte. Y tenemos miedo que esto termine mal y se cierre”, concluyó.
